SEGURIDAD DE TACROLIMUS Y PIMECROLIMUS EN DERMATITIS ATÓPICA

Muchos padres de niños con dermatitis atópica nos preguntan en consulta acerca de los riesgos de los inhibidores de la calcineurina, tacrolimus y pimecrolimus, sobre todo tras leer el prospecto de dichas medicaciones. 

¿Cuándo se originó dicha cuestión? 

Como mucho de vosotros sabéis, en 2006 la FDA colocó una alerta sobre el riesgo teórico de malignidades (incluido el linfoma) con el uso de pimecrolimus y tacrolimus. Diez años después la situación es que diversos estudios epidemiológicos y estudios postcomercialización no han conseguido demostrar una relación causal entre el uso de estos fármacos tópicos y el desarrollo de linfoma u otras malignidades, incluidos niños. Recientemente, en Febrero´15 se publica un estudio prospectivo postcomercialización, probablemente el más grande hasta la fecha sobre una enfermedad dermatológica pediátrica en EEUU. Tras 10 años de seguimiento, y casi 8.000 niños de 2-17 años, no se encuentra asociación entre el uso de pimecrolimus (al menos 6 semanas de exposición y una media de casi 800 gramos de pimecrolimus) y la aparición de tumores, incluidos tumores cutáneos. 

Así, con los estudios disponibles hasta este momento, podemos concluir que el uso de estas medicaciones en dermatititis atópica es seguro. Su utilidad alargando los periodos interbrote así como en zonas propensas a la atrofia tras uso prolongado de corticoides, como la región facial y pliegues, es patente. No obstante, siempre ha de estar monitorizado por el dermatólogo y/o pediatra, quien orientará sobre las pautas más convenientes en cada momento, así como su posible combinación con los corticoides tópicos, los cuales son también piedra angular en el tratamiento de esta patología. 


Comentarios

Entradas populares